Una historia con final feliz

Un día por la mañana, al llegar a la escuelita de Nora, nos dimos cuenta de que Iris no venía en sus brazos como al salir de casa... Buscamos por todas partes pero no aparecía. El disgusto fue enorme, como podéis imaginar. ¡Su muñeca favorita desaparecida! Empapelamos el barrio con cartelitos de "se busca".

Al final resultó que Iris había decidido irse de viaje a Dublín, a aprender inglés y vivir sus propias aventuras. Y así se lo contamos a Nora, que se sorprendió de la decisión pero se alegró de que estuviera bien...

Cuando decidió que ya había aprendido y disfrutado bastante de la experiencia, se dio cuenta de lo que echaba de menos a Nora y a Cloe y regresó. Por el camino, una amable familia la acercó hasta casa. Nunca se lo agradeceremos lo suficiente.

Las chicas, que la esperaban ansiosas desde que se fue, se alegraron muchísimo de su vuelta y le hicieron una gran fiesta de bienvenida.

Se notaba que Iris estaba cansada del viaje (y deseando darse un buen baño), pero contentísima de volver a ver a todas sus amigas. 



 
Traía regalos para todas. 



 














Fue un día maravilloso y muy emocionante, todos lo pasamos genial.






 










   
Pero Iris no venía sola. En Dublín había conocido a Valentina, una italiana con quien compartió habitación en el albergue. Valentina estaba haciendo un viaje por toda Europa y juntas pasaron muy buenos momentos en Irlanda. 

VALENTINA

Cuando Iris decidió volver, Valentina pensó que aprovecharía la ocasión para viajar con ella y conocer Madrid y a esas personas de las que tanto hablaba Iris. 










Valentina encajó a la perfección en la pandilla y lo pasó muy bien durante todo el viaje.

Y por fin, Nora pudo dormir de nuevo abrazada a su muñeca favorita. No se separó de ella en toda la semana...

 

Y fueron felices sin necesidad de comer perdices...

Podéis ver más muñecos de este tipo aquí.