jueves, 18 de diciembre de 2014

Jugando a las Mariquitas



Recuerdo una caja de latón que guardaba de pequeña en mi habitación. La sacaba siempre que venían amigas a jugar a casa, y también cuando estaba sola. Estaba llena de pequeños vestiditos de papel con unos bordecitos blancos que se doblaban y se enganchaban en el cuerpo de una muñeca, también de papel. 


"¿Jugamos a las Mariquitas?"


Las combinaciones de vestuario eran infinitas y podías dar rienda suelta a tu creatividad sin que nadie te llamara hortera porque la ropa no conjuntaba. Superponer capas y capas, mezclar faldas de lunares con camisas de rayas, gorro de lana con camiseta de tirantes... si los mejores modistos podían hacerlo en sus pasarelas, ¿por qué no iba a poder hacerlo yo?




Hace tiempo que quería hacerle este juego a Nora. Ha sido un trabajo largo pero muy bonito y Nora parece estar contenta con el resultado.




Con este libro estrenamos nuestra sección "Otros Trapitos". Os presentamos a Matilde y su gato Rufo. Esperamos que os guste...